9 de Julio
Esa mañana, añadimos a nuestro desayuno macarons de Laduree. Con un desayuno así: feel like a princess (como tiene que ser).
Preparadas para salir
Estuvimos en el barrio haciendo varias cositas.
Llegada la hora de la comida elegimos un restaurante japonés no muy lejos de la casa de Alice llamado:
Eat Tokyo. Como podéis apreciar, los bentos estaban bastante bien y a un buen precio.
Alice posando en "su parada"
Desde allí fuimos al
Design Museum para ver la Exhibición que tenían de
Christian Louboutin. Era el último día de la exhibición y menos mal, me asusté pensando que se nos había pasado el día y que terminaba el día anterior.
Posando delante del museo (véase mi cara de satisfacción)
A punto de entrar...
Se supone que no se podían hacer fotos ni vídeos, pero al ver que algunas persona lo hacían, yo fui igual de mala e hice unas cuantas fotos.
Por las escaleras (hacia la entrada) habían "louboutines" colgando, preparándonos para entrar en otro mundo en dónde el espectáculo, lo elegante, lo erótico, lo fetichista, lo sensual, lo extravagante, lo glamuroso... puede concentrarse en un sólo objeto: el zapato. Pero no cualquier zapato, no, un Louboutin.
Lo primero que veías eran las hormas de Louboutin.
Y juegos de luz y sombras
Había varias salas pero, como ya he dicho, no se podían hacer fotos, así que no saqué muchas más.
Ésta, era la sala central que se presentaba como un cabaret. Tenía un escenario al fondo y una plataforma central en dónde había expuestos varios diseños.
Si observáis en la imagen de arriba, hay un gran zapato al fondo, en el escenario, era un holograma que daba vueltas y cada cierto tiempo sonaba una musica que era el inicio de lo siguiente:
Os puedo asegurar que era como si ella estuviera allí en persona, ¡era espectacular!
Si queréis saber cómo se hizo el holograma -->
aquí.
Entre los muchos pares que se exhibían, uno de mis diseños favoritos es éste:
Los estuve buscando durante todo el recorrido y los encontré casi al final (me parecía raro que no estuvieran, puesto que son un clásico)
Son los llamados Marie Antoniette de los cuales sólo se realizaron 36 pares en color azul, amarillo y rosa palo. Hechos artesanalmente uno a uno y con la colaboración de un experto bordador francés (Jean-François Lesage) y que sólo se podía adquirir en la tienda de Madison Avenue en Nueva York. Ésto fué allá por febrero del 2009. De hecho, los expuesto eran "sample", es decir, la muestra.
Después de estar en el mundo de Louboutin y estar en el cielo (o el infierno, según se mire), sigo admirando aún más a Christian.
De vuelta al mundo de los mortales, cruzamos el Támesis por el famoso Puente de Londres.
Situadas en mitad del puente (y de fondo el color marrón del rio)
Al otro lado.
El puente con los aros olímpicos.
Estabamos a pocas semanas del inicio de los juegos olímpicos y la ciudad estaba inmersa en la preparación de los mismos.
Y madre mía, ¡qué pelo más largo tengo!
Estuvimos paseando por el centro, y llegamos al
Fortnum & Manson, el paraíso para los adictos al té (al té negro). Tienen de todos los sabores y variedades que podéis imaginar, al igual que de pastas y dulces para acompañar al té. Y por supuesto, su fachada es una pasada.
Moraleja: ¡Quiero Louboutins! Y acepto regalos en cualquier momento del año, no tiene porque ser ninguna fecha especial ni nada de eso. ¡Os quiero!